domingo, 26 de octubre de 2008

Televisión Plana

San Diego, California,

Octubre 23.

Un gas utilizado para la construcción de televisores de pantalla plana provoca fuertes emisiones de efecto invernadero, al menos cuatro veces más potentes de lo que se estimó originalmente. El trifluorido de nitrógeno, que es como se denomina el gas, es 17,000 veces más nocivo que el dióxido de carbono y sus emisiones, dada la masiva venta de aparatos de pantalla plana, están aumentando 11 por ciento cada año. Sólo en lo que va del 2008 han subido a la atmósfera 5,400 toneladas de ese gas. El estudio ha sido hecho por un equipo investigador de la Universidad de San Diego, California, dirigido por el geoquímico Ray Weiss. Los televisores planos empezaron a venderse en el año 2006.
(Noticia difundida ayer por la agencia Europa Press).
Cuando el hombre había conquistado lo que nadie hubiera imaginado en los tiempos en que Leonardo da Vinci hacía maquetas de ingenios voladores, un gerente de una corporación japonesa le preguntó a su androide más inteligente:
-¿Algo te disgusta de este mundo que hemos creado virtualmente para gente como tú?
El androide disparó su respuesta en dos centésimas de segundo:
-Me disgusta el grosor de los televisores. ¿No se podrían hacer delgados?
A ese sucesor de Akio Morita la sugerencia del androide le pareció genial, así que convocó a una reunión del Departamento de Innovaciones Tecnológicas (DIT).
Cuarenta cerebros acudieron a la sala de conferencias del DIT y cuarenta días (con sus cuarenta noches) fue el plazo que el CEO de esa Corporación Multinacional, con sede en Tokio, les dio para que trajeran un proyecto que permitiera estilizar, hasta la inverosimilitud si fuera necesario, la profundidad de los receptores de TV.
Así que durante cuarenta días con sus cuarenta noches los genios de la corporación, auxiliados por sus computadoras táctiles y parlantes y los sendos androides que les fueron asignados, trabajaron en el proyecto.
Cerca del plazo dado, en la noche número 36, cuando todo parecía perdido, tres androides concibieron la solución luego de ser transfundidos electrónicamente con miles de algoritmos.
-La salida no es la miniaturización, como creíamos. La salida es la química- dijeron haciendo uso del sincronismo que tanta impresión causaba todavía y empleando esa voz gangosa que salía de una laringe de titanio y aluminio.
Eso era todo lo que los humanos necesitaban para replantear la investigación y encontrar, por fin, la luz del túnel.
En menos de setenta y dos horas, a la hora señalada, el brain staff de la corporación presentó el proyecto de 44 páginas que habría de cambiar, para siempre, la estética de los televisores.
Dos años después, la corporación lanzó el primer “pantalla plana” al mercado internacional. Presentaron al ingeniero en jefe a cargo de Investigación y Desarrollo, oficina de la que dependía el DIT, callaron el servicial protagonismo de los androides y empezaron a barrer de la faz de la tierra los televisores regordetes que hasta hacía pocos días habían sido parte de la decoración de buena parte de las casas del mundo.
La corporación entendía perfectamente que el televisor no era más, desde la refundación del mundo planteada por Ronald Reagan, un mero artefacto. El televisor era, al fin y al cabo, el aparato por el que llegaba a las casas La Televisión.
Y La Televisión era ventana al mundo, fuente de sabiduría estilo CNN, crisol ideológico en cánones de la Fox News, pareja sustituta gracias a los canales porno de acceso abierto, válvula de escape, motor de la emulación publicitaria, vendedora de felicidad al crédito, útero de Marita y del nuevo hombre hecho para el consumo sin tregua, hermana gemela de la realidad, reemplazo de la vida, trasatlántico de los pobres, candado ideológico de las derechas reunidas, cinturón de castidad en contra de las ideas socialistas, géiser de mentiras con sabor a fresa, pantalla de la resignación, basurero que se vende como ramo de rosas, monitor del Gran Hermano, mal gusto a la vena, jardín de senderos que no se bifurcan sino que conducen a la Roma de Berlusconi, pócima de Montaner, farsa catódica.
La Televisión era, en suma, el secreto del sistema y cuanto mejor se presentara, cuanto más estética se viera en los salones de las casas, más segura estaría la corporación y más impertérrito el mundo que la sostenía.
Lo que tampoco dijeron fue el asunto del trifluorido de nitrógeno. Pero eso era un asunto menor. Las pantallas planas, esas casi láminas de marcos color negro espacial que titilaban imágenes de alta resolución -1200 líneas de barrido horizontal por segundo en el sistema NTSC- ya se vendían como si fueran una imperiosa necesidad. De éxitos como ese estaba hecho el progreso. El resto era pesimismo de los comunistas.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

El gas usado para el plasma de las pantallas planas de televisión contribuye a la contaminación atmosférica y el calentamiento global, según denunció el jueves un científico de la Universidad de California.
Peor aún, el trifluoruro de carbono (NF3) es 17.000 veces más poderoso que el dióxido de carbono (CO2), uno de los principales agentes de contaminación, afirma el profesor Michael Prather en un informe publicado por la revista 'New Scientist'.

En una entrevista para la cadena de televisión 'ABC', el experto manifestó que es necesario medir las emisiones del gas que no está incluido en el Protocolo de Kioto sobre cambio climático firmado por la mayoría de los países del mundo en 1997, cuando la producción de NF3 era mínima.

4.000 toneladas de NF3

Prather calcula que solo en este año se producirán 4.000 toneladas de NF3 y que es probable que esa cantidad se duplique en 2009. Es el tipo de gas que se está produciendo en grandes cantidades y no solo no está en el Protocolo de Kioto sino que ni siquiera hay que informar de él. "Eso es lo que me preocupa", indicó.

Las emisiones de las plantas de energía a carbón palidecen frente a las de gas para las pantallas de televisión, agregó.

Se calcula que actualmente la mitad de los aparatos de televisión que se producen en el mundo son de pantalla plana "y el problema es que no sabemos cuánto de ese gas está escapando y filtrándose en la atmósfera", dijo el científico.

Anónimo dijo...

Fdisk said:

Hay otro elemento muy contaminante que no se menciona y es el que contiene los focos ahorradores... pues bien estos focos contiene pequeñas partículas de mercurio, si estos focos no se dan de baja de manera adecuada, harán daño irreversible al suelo y al agua.

Humano 666 dijo...

Bueno, la pantalla plana tiene un grave defecto, si quieres verla de costado simplemente se ve "¡horrible oye!". Ese defecto tiene que ver con sus sistema de barrido, y es por esta simple, pero gran razón, que prefiero mi regordete monitor.

Anónimo dijo...

Me encanta la manera como Cesar escribe articulos empleando tecnicas de ciencia ficcion. Espero que Cesar se anime a escribir una serie de cuentos cortos de ciencia ficcion, lo cual seria grandioso considerando la poca produccion de ciencia ficcion desde este lado del continente.

Anónimo dijo...

¿Será lo mismo para los monitores de PC? A mí en lo particular me hacen ver diferentes los colores de mis garabatos posteados en Deviant Art: se ven con mayor contraste los tonos de negro que en una tradicional computadora, donde se ve muy uniforme si he juntado varias tonalidades de (por ejemplo) negro y gris en un solo pintado. Por otro lado el verde brillante se ve casi fosforecente en la Pentium III.

:S

Pero me quedo con esta frase:

"La Televisión era, en suma, el secreto del sistema y cuanto mejor se presentara, cuanto más estética se viera en los salones de las casas, más segura estaría la corporación y más impertérrito el mundo que la sostenía."