Carlos Alberto Montaner es un típico producto del exilio cubano: exacerbado, siempre atrabiliario e insultador de oficio y beneficio.
Alguna vez se despachó un sañudo artículo en contra del llamado subcomandante Marcos, aquel de Chiapas, a quien acusó de ser un payaso al servicio de los “idiotas sin fronteras” que despotrican de la globalización.
Claro, este es un resumen servicial de algo más vasto y corrosivo. Porque Montaner extiende su odio a Rigoberta Menchú, a Alain Touraine, a Ignacio Ramonet y hasta a la irrelevante Danielle Mitterrand, que –según Montaner- cometió el pecado nefando de usar Chanel número 5 para perfumarse.
Qué mal gusto tiene este señor que “El Nuevo Herald” endiosa y que la prensa que ama a Aznar llama filósofo y que las cavernas de todos los reinos adoran como la serpiente cascabel de la letra impresa.
¿Aparece alguien que ponga en peligro lo que el pobre Montaner cree que es la mecánica celeste de las relaciones sociales –o sea que a los que cortan el jamón no se les toca y lo que es bueno para General Motors es bueno para el mundo-?
Pues allí va Montaner con su navaja de West Side Story, con su chaira salsera de Blades de biblioteca y con su machete literario de Chivo mimado por el Neanderthal del periodismo.
¿Alguien asoma su cabeza para decir que el modelo de consumo actual es inviable a largo plazo? Pues allí va esta mamba negra, salida de Vichy y del Sacro Imperio Germánico, y le pega su mordida.
¿Alguien dice que la aldea global es un cuento para aldeanos del Tercer Mundo mientras Estados Unidos se ríe del planeta en Copenhague? Pues allí está este agente supernumerario del FBI de Fukuyama para decirle “idiota, marxistón, pasado de moda, globoidiota”.
Lo que más se le reprochará a Fidel Castro, más inclusive que la supresión de la libertad y la conversión de una revolución de abajo en una foto fija de la nomenclatura, es la clase de exilio que produjo.
La derrota de la República española inundó América Latina de poetas gratos de leer y de ensayistas inspiradores, que enriquecieron el quehacer cultural de México y Argentina de una manera decisiva.
Pero el exilio cubano, con sus notables excepciones, ha producido una diáspora de bilis que preside el más estúpido de los pensamientos maniqueos del Tercer Mundo. Y Montaner lidera ahora esa fiebre amarilla de la sumisión.
Montaner va al cementerio y escupe sobre la tumba del estalinismo. Es su derecho. Pero luego va a la sede del Partido Republicano en Washington y se arrodilla y le reza a la Triple Alianza. Y cree que Kissinger fue un estratega metternnichiano y no el asesino al servicio de la CIA que realmente siguió siendo a lo largo de su siniestra existencia.
Y tiene un grupete de pandilleros de la inteligencia –Plinio Apuleyo Mendoza es su compinche, Eduardo Galeano es su blanco preferido, Mario Vargas Llosa es su idolatría casi sospechosa- que recorre barrios con pinta de trabajar para los Soprano y que quiere saber quién se rebela, quién se está dejando barba, quién compra pasamontañas, quién lee a Chomsky, quien comentó favorablemente “El horror económico”, qué frutera aspira a ser Menchú, qué tal lisura.
El pobre Montaner ha terminado pareciéndose a su peor enemigo. Es un Fidel Castro que tiene su paredón de papel continuo y una Siberia con palmeras en el alma.
Haría con Marcos y con Galeano lo que Castro hizo con él: los convertiría en operadores hidropónicos del pensamiento único, en alguaciles del Big Brother y en capitanes del Exxon Valdez.
Sin país, creyendo que el mundo es ese lobby eterno de los hoteles 5 estrellas, Montaner terminará de relacionista público de Monsanto. Entonces desatará su furia sobre los militantes de Green Peace. Cosa que ya está haciendo, dicho sea de paso.
domingo, 3 de enero de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
3 comentarios:
Ese Andres se contrasueleo con todo y ego, cuando Coelho, en muchos casos comparó su relación con la democracia de Uribe con Hugo Chávez (que es, lo mas razonable e imparcial que le he oido decir).
La pregunta es ¿seguirá teniendo sus mismos acomplejaditos (en su gran mayoría)"repite todo lo que dice fans"?.
Pobre Andres.
En este pais, por una cuestion de idioma y opciones, lei a Montaner 3 o 4 veces... y muchas otras en las que nunca pude terminar sus articulos. Idolo (Montaner) de 'intelectuales'? como Jaime Bayly, es dificil ser objetivo con una persona que no conoce su significado y ademas escribe con un 'libreto' ideologico.
El problema en realidad es el pais que exilia a los exiliados ,EEUU, y tambien Espana es un mal lugar, todos son transformados como si de hechizo se tratara.......
Sino miren tambien al hijo de Mario Vargas LLosa por ejemplo.....
Y Aznar se cree que el Peru va a repetir lo que el hizo con Espana , para que todos sus compinches empresarios entren a remeser la cabeza por esos lares tambien.
Lo peor de Espana y de Chile y de etc. esta entrando al Peru, que asco de verdad, todo por sus aires de superioridad , ya de todos lados esto, que se creen que al Peru ahora les toca esa chusma de emprendedores , que han vuelto loca a su gente cuando han "reinado"....Porque se creen que el Peru es de tontos....
Por eso peruanos dejense de volar y de estar babeando por encontrar la aprobacion de cualquiera que venga de fuera,que ser aperturista en todo con gente asi, es estar fuera de la realidad y como sea tenemos que entrar a ella, lamentablemente y debemos saber que clase de gente es la que llega al Peru, gente que no respeta los valores , mas que la ambicion, por lo tanto , debemos desconfiar constantemente.
Y a los Fujimoristas y otros repetidores:hay hormonas masculinas en frasco ¡tomenlas!, pero ya, y dejen la sumision a otros hombres que por si acaso los quieren para una sola noche.........
saludos.
Publicar un comentario